viernes, 14 de diciembre de 2007

LA VERDAD ACERCA DE PERROS Y GATOS

En materia de cómics y dibujos animados, la verdad acerca de perros y gatos parece ser que los gatos aparecieron primero.

Allá por 1919 surgía un gato llamado Master Tom en un corto de Paramount Pictures.
Este personaje, con algunos retoques hechos ese mismo año, sería nada más y nada menos que el gato Félix. Su nombre surgió en base a dos palabras latinas: felis (gato) y felix (suerte).



Sería un personaje muy popular a lo largo de los años, munido de su bolsa mágica (de la cual podía salir cualquier cosa). Hasta fue el nombre de un escuadrón de aviación en la Segunda Guerra Mundial. Y estaba presente en la insignia de los aviones, faltaba más:

El siguiente personaje famoso en surgir fue un perro: nada menos que Pluto, en 1930.

No siempre fue la mascota de Mickey. En algunos cortos aparece acompañando al pato Donald y en otros a Tribilín. Pero finalmente quedó como perro del simpático ratón.


Pluto es interesante dentro de la galería de personajes de Disney, porque no es antropomórfico: es un perro cien por ciento genuino. Aunque con ideas y pensamientos, claro.

El siguiente en la lista es todo un ídolo de las desventuras: Silvestre.
Al principio aparecía solo, pero en 1947 se le unió a otro personaje: el canario Piolín.

El resultado fue el corto "Tweety pie", que tuvo tanta repercusión que hasta ganó un Oscar.
Y no sería el único: en 1957, otro corto de Piolín y Silvestre se llevaría una estatuilla.

La famosa frase "Me pareció ver un lindo gatito", surgió de la correspondencia entre el creador de Piolín, Bob Clampett, y un amigo, haciendo referencia a un dibujo de un pajarito.




Silvestre tendría esporádicas apariciones con Speedy González y con un canguro boxeador, pero siempre volvería con Piolín. Llevándose todos los porrazos, claro.
En su último formato, aparecería como mascota de Granny, la abuelita, intentando siempre en vano atrapar a Piolín y evadirse del bulldog Spike.


Sigue el turno para los gatos: Tom sería el prototipo del abusivo grandote en su intento de cazar al astuto Jerry. Desde 1940 que lo intenta.


Para desgracia de Tom, no sólo debe lidiar con la inteligencia del ratón, sino que frecuentemente entra en escena un perrazo que le da su merecido.


Los personajes conocieron diversas etapas y cambiaron de producción más de una vez, llegando incluso a un estudio de Europa del este (Rembrandt Films), pasando por Hanna-Barbera, la MGM, Sib-Tower 12 Productions y Filmation Studios.


Los perros retoman la fama en 1943 con un personaje de Tex Avery para la MGM: Droopy.

En su primer corto, Droopy se dirige a la audiencia y dice: "Hola, gente feliz. ¿Saben una cosa? Yo soy el héroe."
De hablar y comportamiento cansino, Droopy es sin embargo lo suficientemente astuto como para batir cualquier enemigo. También tenía una fuerza desproporcionada para su tamaño, aunque no se enojaba a menudo.

Usaba otras tácticas. En uno de sus cortos más graciosos, se le aparece en todas partes al villano, que enloquece antes de poder huir.



Los perros seguirían de buenas. El siguiente en la lista de famosos es un clásico absoluto: Snoopy.

Acompaña desde 1950 a su dueño Charly Brown (o Carlitos, para nosotros).

Comenzó sin diálogo y andando en cuatro patas, como un simple perrito. Pero luego Charles Schultz tuvo la brillante idea de darle más facultades y más participación, hasta que Snoopy se convirtió en centro de la tira cómica.
Comprende lo que dicen los demás personajes y puede comunicar sus pensamientos al lector.

Incluso puede, desde el techo de su casita, soñar con ser un escritor, un músico famoso o un as de la Primera Guerra Mundial.
Es famosa su "rivalidad" con el Barón Rojo o sus intentos de plasmar una obra literaria, que generalmente comenzaba con la frase "Era de noche y sin embargo llovía.", tomada de una novela de Bulwer-Lytton.
Años más tarde aparecería en la tira un buen amigo de Snoopy: el pájaro Woodstock.

En 1961, los gatos respondieron, no con un personaje, sino con toda una tribu de felinos: Don Gato y su pandilla: Panza, Espanto, Benito, Demóstenes y Cucho.



Prototipos de los gatos callejeros, cada personaje tenía su propia personalidad. Haciendo balance con las tropelías de la pandilla, aparecía el oficial Matute, que amenazaba siempre con encarcelarlos pero terminaba actuando como un buenazo.

La serie animada constaba de 30 episodios y fue producida por Hanna-Barbera, anotándose otro éxito más.

Y los gatos siguieron con todo. El 19 de junio de 1978 aparecía Garfield, el gato más glotón y holgazán que el mundo haya conocido. La fecha quedó marcada como el nacimiento del personaje (y todas las tiras de cada 19 de junio le muestran celebrando su cumpleaños).


Básicamente, la tira muestra quién manda a quién en la relación amo-mascota.
El personaje sufrió algunos cambios: engordó un poco (lo cual es razonable, dada su predilección obsesiva por la lasaña y las pizzas), se fue "humanizando" cada vez más y su humor ácido se concentró en su amo Jon y la otra mascota (el perrito Oddie).




Dejé para el final, expresamente, a un personaje no tan conocido al cual declaro como uno de mis favoritos: el perro Pulgoso.

Creado por Hanna-Barbera, el lindo Pulgoso acompañó a lo largo de 27 episodios a su dueña, una abuelita un tanto hippie.

Es así que Granny Sweet surfeaba, manejaba vehículos diversos y corría aventuras donde la astucia de Pulgoso tenía un papel fundamental. Al final, todo se resolvía para bien y Pulgoso reía burlonamente como cierre infaltable del episodio.



Como ven, la verdad acerca de perros y gatos, es que tanto en la vida real como en los cómics y dibujos animados, siempre nos han acompañado.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias por mandarme al pasado con tanta diversión. Muy bien blog!!?